Para la mayoría de los viajeros, el viaje a Nueva Zelanda parece demasiado largo y caro, por lo que este destino turístico ni siquiera se considera un destino de vacaciones. Sin embargo, la cultura de Nueva Zelanda, sus magníficos parques naturales y reservas son excelentes razones para comprar billetes de avión a estas islas alejadas del centro de la civilización mundial.
Maorí y su herencia
La herencia y las tradiciones maoríes han jugado un papel muy importante en la configuración de la cultura de Nueva Zelanda. La población indígena de las islas durante muchos siglos ni siquiera tuvo un lenguaje escrito, pero gracias a este hecho, el arte del tallado en hueso o madera recibió un extraordinario desarrollo. Con la ayuda de estas artesanías, los maoríes transmitieron información a sus descendientes y conservaron sus habilidades y tradiciones. La lectura de las tallas sigue siendo una parte integral de la cultura de Nueva Zelanda y sus pueblos indígenas en la actualidad.
Una antigua tradición cultural maorí: el tatuaje, que era un símbolo de cierta posición en la sociedad y el estatus social. Las danzas rituales del khaka eran igualmente importantes. Las interpretaciones modernas de los movimientos de baile se han adoptado como símbolos en las fuerzas militares y navales de Nueva Zelanda.
Museos del fin del mundo
La historia y el desarrollo de la cultura neozelandesa se reflejan en las exposiciones de los principales museos del país:
- La exposición del Museo Te-Papa, conocido como el Museo de Nueva Zelanda, incluye varios cientos de miles de exhibiciones. Más de un millón y medio de visitantes que lo visitan anualmente están invitados a familiarizarse con la historia y la cultura del país, sus características geográficas y climáticas.
- El Museo de Historia Militar de Auckland se fundó a mediados del siglo XIX y desde entonces se ha convertido en uno de los más respetados y amados por los neozelandeses.
Ciudadanos famosos del país
Sus famosos nativos hicieron una contribución significativa a la formación y desarrollo de la cultura de Nueva Zelanda. El mundo entero conoce los logros del "padre de la física nuclear" Ernest Rutherford y el historial de Edmund Hillary, que fue el primero en conquistar el Monte Everest. Los isleños están orgullosos de Bruce McLaren, el legendario piloto de Fórmula 1 y cineasta de la trilogía de El señor de los anillos, Peter Jackson, filmada en la inmensidad de los parques nacionales de Nueva Zelanda. El actor Russell Crowe recibió un Oscar por su papel de gladiador, y el crítico literario Brian Boyd se hizo famoso por escribir la biografía más detallada de Vladimir Nabokov.