Descripción de la atracción
El castillo de Montemor-o-Velho se encuentra en la pequeña localidad del mismo nombre en el distrito de Coimbra. Como muchos otros castillos de la zona, este castillo formaba parte de la línea defensiva alrededor de Coimbra en el siglo XII. El castillo se encuentra en una colina, una estructura hermosa y masiva, y en un momento fue una de las fortalezas más estratégicamente importantes de Portugal.
La primera mención del castillo se remonta al año 716, cuando el castillo fue ocupado por los moriscos. Existe una versión de que el nombre de "Montemor" fue dado al castillo por los árabes, que ganaron en 990 una batalla con los cristianos y gobernaron aquí hasta 1064.
Las ruinas del castillo se ubican dentro de dobles almenas con impresionantes torres y aspilleras. Algunas de las torres se pueden subir, desde donde se puede disfrutar de unas impresionantes vistas del entorno: el valle del río Mondego, impresionantes arrozales y choperas.
En la parte norte se encuentra la Iglesia de Santa María de Alcacova, construida por el célebre arquitecto Boytaca en estilo manuelino (siglo XVI). En el interior de la iglesia, el techo es de madera, las paredes están decoradas con azulejos de estilo morisco del siglo XVI y hay una pila bautismal.
A lo largo de los siglos, el castillo se ha reconstruido varias veces. Durante el reinado del rey Afonso VI de Castilla (siglo XI) se llevaron a cabo trabajos de reconstrucción. Un poco más tarde, se construyó en su interior una fortaleza y residencia para la princesa. En el siglo XIII, el castillo sirvió como residencia real. En el siglo XIV se realizaron cambios importantes y trabajos de reconstrucción, incluida la construcción de pozos de drenaje.
Desde 1910, el Instituto Portugués del Patrimonio Arquitectónico ha declarado el castillo de Montemor-o-Velho monumento de importancia nacional.
