Descripción de la atracción
El lugar central de Basilea está ocupado por la Catedral, el símbolo de la ciudad. La catedral es una basílica de estilo románico tardío con una nave transversal y un coro del siglo XII y tiene muchos elementos góticos característicos. Los muros de la catedral están construidos con piedra arenisca roja y están rematados con un techo de tejas de colores y dos torres. Sobre el portal central está el emperador Enrique II, el fundador de la catedral, sosteniendo un modelo del templo en sus manos. Junto a él está la emperatriz Kunigunda.
Después de un severo incendio ocurrido en 1258, el templo fue renovado y se construyeron capillas-tumbas en los pasillos laterales. Después de que el devastador terremoto de 1356 destruyera las bóvedas, torres y cripta de la catedral, el edificio fue reconstruido de acuerdo con el estilo de la época. Esto se evidencia especialmente en la decoración escultórica de la catedral.
En la parte norte de la catedral se encuentra la tumba de Erasmo de Rotterdam. En la cripta de la catedral se conservan fragmentos de frescos del románico tardío y un lapidario, los restos de la mampostería de piedra del templo del siglo IX.
