Descripción de la atracción
El museo está ubicado en la Plaza de la Revolución. Un enorme fondo de exhibición se encuentra en un antiguo palacio real con una rica historia arquitectónica. Construido en 1812, el edificio fue dañado por un incendio en 1926 y un bombardeo en 1944. Sin embargo, el palacio siempre ha sido restaurado en su estilo neoclásico original.
El museo se estableció en 1950 sobre la base de la colección de Carol I, el primer rey rumano. Posteriormente, se complementó con colecciones privadas y exhibiciones del famoso Museo Rumano Brukenthal en Sibiu. En 1990, comenzó una reconstrucción y restauración a gran escala del edificio, que duró diez años. El Museo fue reabierto a los visitantes en 2000, pero por completo, solo en 2002.
El número total de exposiciones se acerca a las 300 mil. En las salas del Museo hay una gran colección de artes decorativas y aplicadas, muebles antiguos, alfombras, loza, tapices, utensilios de iglesia y una extensa colección de iconos.
La pintura ocupa el lugar principal e incluye casi todas las direcciones, desde la pintura florentina y el Renacimiento temprano hasta el surrealismo, el impresionismo, el marineismo, etc.
Los conocedores se sienten atraídos no solo por los lienzos de Rubens, Rembrandt, Repin, Aivazovsky y otros pintores legendarios, sino también por las obras de artistas rumanos contemporáneos. Esculturas y una colección de gráficos toman su lugar en la exposición.
El museo consta de tres galerías: Arte europeo, Edad Media rumana y Arte contemporáneo rumano. Este último presenta toda la historia de la pintura nacional, desde los retratos boyardos hasta las obras de mediados del siglo XX. Todas las galerías están unidas por una única forma en que se exhiben las exhibiciones. Esta atractiva exhibición contemporánea hace que explorar el Museo sea divertido y placentero.