Muy a menudo nos atraen ciudades lejanas con su propia cultura, variedad de monumentos arquitectónicos e históricos. Sin embargo, a menudo descuidamos a nuestros países vecinos. Estos incluyen Letonia, que es popular entre los turistas. Hay algo que ver aquí. En primer lugar, es, por supuesto, la capital de Letonia, Riga, con un casco antiguo perfectamente conservado, que, al parecer, no se ha tocado en absoluto durante años y siglos. Además de la capital, hay muchos lugares igualmente asombrosos en el país, aunque menos conocidos. Por eso, si utiliza un servicio como los viajes en autobús, Letonia se abrirá a los viajeros de un lado completamente diferente.
El autobús es más conveniente
Para quienes viajan a Europa con fines culturales y educativos, viajar en un autobús turístico será sin duda la mejor opción.
- En primer lugar, este método se diferencia de todos los demás por un precio relativamente económico.
- En segundo lugar, un turista en un período de tiempo bastante corto podrá ver una gran cantidad de lugares de interés y escuchar mucha información sobre Letonia.
- En tercer lugar, los recorridos en autobús le permiten familiarizarse no solo con la vida de los letones urbanos, sino también sentir el espíritu nacional del país mientras viaja por el interior. Finalmente, durante dicho viaje, los turistas degustarán muchos platos de la cocina nacional.
Un poco sobre lo bello
Además de la magnífica Riga, que es la capital del estado, los viajeros definitivamente visitarán varios lugares más que han jugado un papel importante en la historia del país.
Jelgava puede considerarse legítimamente la ciudad más verde de Letonia. En estos hermosos lugares hay muchas áreas protegidas y parques diferentes, que albergan a muchos representantes de diversas especies de aves, así como peces. También hay muchos palacios diferentes hechos en un lujoso estilo barroco.
Otra ciudad antigua del país, una visita obligada durante un recorrido en autobús, es Ventspils. Casi todas las calles del centro histórico de la ciudad están llenas de azulejos de aspecto extraordinario. La vista de un turista seguramente captará la admiración silenciosa por las composiciones únicas de fuentes locales y pirámides de flores frescas. También hay muchos edificios históricos diferentes, incluido el castillo medieval de Ventspils.
Letonia es rica no solo en ciudades antiguas, hay muchos centros turísticos maravillosos en el país. El principal y más pintoresco de ellos es Jurmala. Cabe destacar que el complejo se formó a principios del siglo XIX y es uno de los más antiguos de Europa.
Letonia es un país tan mesurado y tranquilo que vale la pena ir de vacaciones para tomar un descanso del bullicio y la vida cotidiana de una gran ciudad y recuperar la vitalidad.