Este pequeño y acogedor país atrae a los turistas con la oportunidad de relajarse con calma y mesura. Aquí puede pasear por castillos antiguos, catedrales y relajarse en la costa báltica. Para no estropear sus vacaciones con sorpresas, es mejor conocer de inmediato todas las peculiaridades nacionales de Letonia.
Características nacionales
En primer lugar, los letones siempre honran sus tradiciones y su historia. Son muy viables y soportan fácilmente las dificultades. Su rasgo de carácter nacional se puede distinguir por un cierto aislamiento, que se explica por la vida de sus antepasados en granjas remotas. Este tipo de amor por la vida en el campo también se manifiesta en los letones modernos. Para ellos, una casa así es como un nido familiar, por lo que se le presta la máxima atención. En comunicación, son bastante simples y muchos saben ruso. Además, su carácter está dominado por la ambición. Les encanta demostrar a los demás su independencia en todo.
Cocina
La cocina letona se basa en productos muy sencillos. En primer lugar, se trata de patatas, guisantes, frijoles, verduras y leche. La verdura más favorita es el repollo, especialmente el chucrut. El cerdo se come sobre todo de la carne. Se hornea, se hierve la carne en gelatina. Otros tipos de carne no son muy comunes, excepto el de cordero y aves. Los letones son muy aficionados a los platos de pescado, utilizando tanto pescado de mar como pescado de agua dulce para cocinar.
A primera vista, muchos ingredientes de la cocina letona no coinciden en absoluto. Pero al mismo tiempo, le dan a la comida su propio sabor único. Por ejemplo, sopa de pan con frutos secos. Hay muchas sopas en general, y las más diversas, por ejemplo, dulces o con albóndigas. Es muy común una combinación interesante de patatas con requesón. Los platos tradicionales incluyen: putras (gachas con pescado); pudinsh (cazuela de patatas con arenque); klops (filete con salsa de cebolla).
Letonia también es famosa por sus quesos. Entre los postres más populares se encuentran el bubert, el pan de yogur, las tartas "Vecriga" y los helados. Los letones prefieren sus bebidas a las bebidas. Se trata de una variedad de gelatina, que está hecha no solo de bayas, sino también de guisantes o avena. También cabe destacar la gelatina de ruibarbo y el kvas de pan. Entre las bebidas alcohólicas, el bálsamo de Riga, famoso más allá de las fronteras del país, y la cerveza, que los letones elaboran en grandes cantidades.