¡Georgia es un país asombroso! Además de la hospitalidad de sus residentes y una gastronomía única, que no tiene igual en ningún lugar del mundo, la república de Transcaucasia invita a los huéspedes a disfrutar de las majestuosas montañas, los lagos más puros y los manantiales minerales conocidos por la gente desde hace mucho tiempo. Diez parques nacionales de Georgia son su propiedad y orgullo, y en cada uno de ellos un viajero curioso encuentra paisajes únicos y bellezas naturales.
En la hospitalaria Kakheti
La región vinícola de Kakheti es un destino turístico popular en la República de Georgia. Los parques nacionales de Kakheti son visitados anualmente por miles de turistas que quieren probar el verdadero oro de esta tierra: los deliciosos vinos georgianos. Los huéspedes pueden ver cómo se cosechan las uvas y se prepara la bebida de los dioses en dos parques nacionales:
- En la región montañosa de Tusheti, prácticamente al margen de una gran civilización. En este parque nacional de Georgia todavía se encuentran animales raros y especies de plantas únicas. Tusheti es el hogar de la gamuza caucásica y el lobo del Caspio, faisanes de montaña y linces. Hay muchas rutas de senderismo y caballos en el parque, y en los pueblos antiguos se han conservado monumentos históricos únicos, fortalezas y torres. Puedes alojarte en cualquiera de los hoteles familiares.
- El parque Vashlovani, en la misma frontera con Azerbaiyán, fue creado para preservar los bosques ligeros de estepa. El paisaje único está creado por cañones y cuevas kársticas, y la rica flora está representada por más de 650 especies de plantas, que incluyen higos, granadas, arces y pistachos. La fauna de la reserva no son solo zorros, lobos y gatos salvajes, sino también elegantes leopardos.
Bálsamo para el alma
Dicen que el parque Borjomi-Kharagauli dará cien puntos por delante del Karlovy Vary checo no solo en términos de la calidad del agua curativa, sino también en términos de belleza natural. Es muy fácil asegurarse de que estas palabras sean ciertas: solo tiene que ir al famoso parque nacional de Georgia. Los autobuses y los taxis de ruta fija van de Tbilisi a Borjomi, y en la propia ciudad hay suficientes hoteles y apartamentos privados para sentirse como un huésped bienvenido.
El parque de Borjomi se encuentra a una altitud de 800 metros sobre el nivel del mar, y el aire de la montaña, mezclado con aromas de coníferas, forma aquí un cóctel curativo único que cura tanto las enfermedades como el mal humor. Los manantiales minerales de Borjomi se conocían hace cientos de años, y hoy en día esta agua es uno de los principales productos de exportación de Georgia.
Alguna información útil:
- La entrada al parque Borjomi cuesta 1 GEL. Puede caminar hasta un manantial mineral cálido, cuyo agua cura docenas de enfermedades, y hasta una piscina caliente. El baño le da frescura a la piel y claridad de pensamientos.
- Montar en un teleférico sobre Borjomi es una oportunidad para admirar una vista maravillosa de la ciudad a vista de pájaro. El precio de la emisión es de 3 GEL. Hay una noria en la parte superior del funicular.