Descripción de la atracción
El Barrio Gótico de Barcelona es la parte más antigua de la ciudad: aquí estaba el asentamiento romano de Barcino. El principal atractivo del Barrio Gótico es la Catedral.
En el siglo XV se construyeron aquí los edificios del Ayuntamiento y de la Generalitat de Cataluña. El ayuntamiento fue posteriormente reconstruido, pero parte de la decoración gótica con el escudo de armas de Barcelona permaneció en el lateral del edificio. A la entrada de la alcaldía hay dos monumentos: Jaume I, que fundó el Ayuntamiento de Barcelona en el siglo XIII, y J. Fivelier, que obligó a la nobleza de la corte a pagar impuestos en el siglo XVI. Frente al Ayuntamiento se encuentra el Palacio de la Generalitat de Catalunya. La fachada del edificio fue reconstruida en estilo renacentista. Sobre la entrada principal hay una estatua del santo patrón de Cataluña, St. George derrotando al dragón. Destacan la capilla gótica de Sant Jordi, el maravilloso Patio de los Naranjos y el campanario del siglo XVI. Aquí trabaja el presidente de Cataluña.
El Palacio Real fue construido en el siglo XIII como residencia de los Condes de Barcelona. En el magnífico Tinel Hall, un espécimen gótico del siglo XIV, el rey Fernando y la reina Isabel recibieron a Colón, que había regresado de un viaje. Más tarde, el Tribunal Santísimo se sentó aquí.
La Casa del Canon es el único edificio gótico del siglo XI construido sobre cimientos romanos. El edificio fue construido para una casa de beneficencia, donde se organizaban las cenas para los mendigos de la ciudad, en 1450 la casa fue entregada al canónigo (uno de los sacerdotes) de la catedral de la ciudad. Ahora alberga la residencia del presidente de Cataluña.
La casa del arcediano se construyó sobre los cimientos de un edificio del siglo XII, posteriormente se añadió una galería y un pequeño patio con fuente. El archivo ahora se encuentra aquí. En la puerta, hay un buzón divertido decorado con tallas de una golondrina, que simboliza la esperanza de una respuesta rápida, y una tortuga, que simboliza el ritmo de entrega del correo.
Destacan también dos museos del Barrio Gótico: el Museo de Historia de la Ciudad y el Museo del escultor Frederic Mares.