Descripción de la atracción
El Parque La Leona fue planeado en 1840 en el espolón El Picacho del distrito de La Leona. A pesar de las leyendas sobre los leones, que dieron nombre a la zona, aquí se empezaron a construir las primeras casas de gente adinerada. El municipio cedió terrenos a familias interesadas en construir y conectar con los sitios de La Ronda y La Pedrera. Las grandes residencias abovedadas fueron diseñadas por el inmigrante alemán Gustav Walter, y estos edificios aún sobreviven en la actualidad.
En Tegucigalpa se producen una serie de transformaciones entre 1910 y 1930, la administración del presidente López Gutiérrez inicia las obras de construcción sistémica en el Parque de La Leona bajo la dirección del arquitecto Augusto Bressani. Se levantó un enorme muro de piedra para evitar la lixiviación del suelo durante la época de lluvias, a lo largo del mismo se pavimentó una calle que se levantaba en oleadas desde La Pedrera, se decoraron farolas con elementos de hierro forjado al estilo francés, y además, en el centro se colocó un monumento al general Manuel Bonilla (ex presidente de la república), realizado en bronce.
El gobierno inauguró oficialmente el parque en 1925. Desde entonces, La Leona se ha convertido en un lugar muy popular en la capital, ya que es una de las zonas más pintorescas de la ciudad. Además de varios tipos de árboles, una cancha de baloncesto, callejones y senderos, varios jarrones antiguos, el jardín es famoso por sus impresionantes vistas de la ciudad y sus alrededores.
El parque está ubicado en el centro histórico de Tegucigalpa, cerca de todos los monumentos famosos.