Un pequeño y bello estado europeo, modestamente ubicado en la parte occidental del continente, ha tenido durante mucho tiempo una autoridad indiscutible en el campo del turismo. España sabe sorprender, asombrar y deleitar a sus invitados.
En invierno, los españoles están preparados para la invasión de los amantes del esquí alpino, en verano es difícil encontrar un lugar en la costa, en primavera u otoño en ciudades y pueblos puedes conocer a viajeros curiosos descubriendo la rica historia del país o sus tradiciones nacionales, gastronomía y bellos paisajes naturales.
Mientras tanto, el turismo en España comenzó a desarrollarse no hace mucho tiempo, a mediados del siglo pasado, cuando aumentó considerablemente el flujo de huéspedes, principalmente de países vecinos. Y a finales del siglo XX, un país relativamente pequeño ocupó el cuarto lugar en términos de número de visitas de turistas.
El secreto de España: sol y mar
El turismo de playa es el foco principal de la industria vacacional en este país y los negocios más rentables. Aquellos que quieran relajarse en la costa se sienten atraídos por el clima templado, que es cómodo para niños, adultos y ancianos. Las Islas Canarias o Baleares, que durante mucho tiempo han sido reconocidas como un paraíso terrenal, son especialmente famosas por esto. Estos lugares son elegidos por turistas de países ubicados al norte de España.
Los balnearios catalanes de la Costa Brava, Costa Dorada han llegado a ser del agrado de sus vecinos más cercanos - los franceses, y los propios españoles no se niegan a sí mismos el placer de tomar el sol y meterse en los brazos de las suaves olas del mar. Los viajeros alemanes e ingleses ocupan la costa de Valencia.
Una cultura con un rico pasado
Casi todos los turistas, excepto el descanso real en el mar, realizan diversas rutas de excursión para conocer mejor la naturaleza y la cultura de España, sus monumentos y artefactos.
Muchos de los huéspedes del país visitan en primer lugar la capital española más bella y Barcelona, cuyo himno, interpretado por las brillantes Montserrat Caballe y Freddie Mercury, conquistó el planeta. Tanto Madrid como su rival turístico Barcelona han recopilado monumentos únicos de la historia de España, que reflejan la vida de muchas tribus y generaciones.
Diez ciudades más, incluidas en las listas del Patrimonio Mundial de una organización tan respetada como la UNESCO, pueden competir fácilmente en el número de testigos supervivientes de un rico pasado. Los más atractivos, según los turistas, son Ávila, Toledo, Segovia, Sevilla, Córdoba y Salamanca.