Es recomendable ir a París con una persona que quiera confesar constantemente su amor; esta ciudad es tan romántica, gentil y sorprendentemente emocional. Es ideal para lunas de miel o celebraciones de San Valentín. Es agradable proponer aquí, o simplemente besarse en la cubierta de un autobús acuático que flota pacíficamente junto a los monumentos arquitectónicos más bellos y antiguos del mundo. Para los enamorados, el romance de París brinda una cascada especial de sentimientos que llenan los corazones hasta los topes.
Cinco besos de febrero
Una vez en la capital francesa el 14 de febrero, no puede, ¡pero necesita salir de una cálida habitación de hotel! El día de San Valentín se celebra aquí a gran escala y con una imaginación incontrolable. Lo mejor que puede hacer una pareja enamorada en un día así es capturar sus momentos de felicidad para la posteridad. La forma más agradable de hacerlo es besarse y tomar fotografías en lugares románticos:
- Puedes empezar desde la Torre Eiffel. Puede hacer frío en su plataforma de observación en febrero, pero el romance de París será perfectamente visible en la foto del beso en el contexto de la inmortal belleza calada.
- Intente repetir el éxito de los héroes de la famosa fotografía de Doisneau "Un beso en el ayuntamiento de París". A los transeúntes no les importará capturar a una linda pareja en el contexto de un edificio antiguo.
- Baja por debajo del puente de María y besa a tu elegido o amado con la esperanza de vivir felices para siempre con él o ella hasta el final de tus días. La leyenda local dice que este puente es el lugar más adecuado para realizar tales deseos.
- Como telón de fondo para un beso, el cabaret de Paris Moulin Rouge te vendrá bien. Puedes comprar cosas lindas para dos en las tiendas para adultos cercanas.
- Los fotomatones se instalan en cualquier estación de metro, donde el beso será capturado por equipos profesionales. Establecer un récord personal y visitar tantas estaciones de metro como sea posible en un día es un escenario interesante para unas vacaciones para todos los enamorados.
No es el ultimo tango
Para aquellos que prefieren confesar su amor a su pareja con la mayor frecuencia posible, los parisinos han hecho un muro especial en Montmartre. Las preciadas palabras están escritas en él en 311 idiomas, y si pones la palma de tu mano en la pared del amor, cualquier deseo se hará realidad.
Se recomienda a los viajeros solteros que realicen este ritual para finalmente conocer a su alma gemela. Juntos, pueden ir al Quai Saint-Bernard, donde la gente baila por las noches. Tu primer tango en París será solo el comienzo de un largo y feliz viaje llamado amor.