Descripción de la atracción
Durante varios siglos, Ámsterdam ha sido considerada el centro del comercio europeo de diamantes, y la habilidad de los joyeros y cortadores holandeses se considera insuperable. Los joyeros de la antigua India intentaron procesar el diamante, el mineral más duro de la naturaleza, pero solo pulían cristales naturales. Cortar diamantes en el pleno sentido de la palabra, es decir, el maestro flamenco Lodewick van Berkem fue el primero en crear nuevas facetas en la superficie del cristal en Europa. Desde el siglo XVIII, los principales talleres de corte se encuentran en Ámsterdam. En el siglo XIX, se descubrieron depósitos de diamantes en Sudáfrica, que entonces era una colonia holandesa, lo que fortaleció aún más la posición de los joyeros y cortadores de Ámsterdam. Incluso ahora, con sus talleres de corte ubicados principalmente en Asia, Ámsterdam sigue siendo el centro de comercio de diamantes más grande del mundo.
A pesar de una tradición histórica tan larga, el Museo del Diamante se inauguró en Ámsterdam hace relativamente poco tiempo, en 2007. Está ubicado en un edificio del siglo XIX especialmente acondicionado para este propósito. El museo está ubicado cerca del Rijskmuseum y el Museo Van Gogh. El fundador del museo de diamantes es Bonfire Diamonds, la mayor empresa comercializadora y de corte de diamantes.
La exposición del museo muestra cómo aparecen los diamantes en la naturaleza, cuenta la historia del amor humano por estas hermosas piedras e intenta analizar cómo sucedió que un diamante simboliza no solo la riqueza, sino también la belleza y el poder. Aquí encontrará copias de las piedras más famosas, coronas históricas engastadas con diamantes, diamantes famosos que tienen sus propios nombres, así como la "calavera de mono de diamantes".
Los visitantes del museo tienen la oportunidad de ver el trabajo de los maestros cortadores, y aquellos que lo deseen pueden probar suerte en el corte; por una cierta cantidad, recibirá un diamante en bruto y artesanos experimentados lo ayudarán a cortarlo.