Descripción de la atracción
La Iglesia de San Miguel es la principal iglesia evangélica de Hamburgo y es uno de los edificios más importantes del norte de Alemania. El majestuoso templo del barroco tardío fue dedicado al Arcángel Miguel. Está ubicado en la zona sur de la Ciudad Nueva, y sus torres se pueden ver incluso desde los barcos que se dirigen al puerto.
La historia de esta iglesia comienza en el siglo XVI, cuando Guillermo V el Piadoso dio el visto bueno para su construcción. Los costos de uno de los principales baluartes de la Contrarreforma fueron tan altos que el estado casi se arruina. La fachada de la recién construida Iglesia de San Miguel estaba decorada con la figura de Cristo, que se parecía un poco al tradicional ayuntamiento de la Edad Media. En la entrada había una figura de bronce del Arcángel, creada a finales del siglo XVI.
Después de la construcción del edificio, esperaban muchas pruebas, una de las cuales fue la destrucción significativa de una de las torres. En 1648, Peter Marquardt y Christoph Corbinus asumieron la siguiente etapa de construcción. Desafortunadamente, en 1750 el campanario del templo se derrumbó como consecuencia de un fuerte incendio provocado por un rayo. A pesar de esto, al año siguiente, comenzó la construcción de un nuevo edificio, pero ya de acuerdo con el proyecto propuesto por Johann Leonard Prey y Ernest Georg Zonnin. En 1786, apareció una nueva iglesia ante los residentes, cuya decoración era un techo muy elegante, pero al mismo tiempo, brillante.
Aquí estaba la cripta real, donde fueron enterrados Guillermo V, el elector Maximiliano, así como Luis II y numerosos santos, cuyos nombres no se pueden establecer debido a la destrucción militar del pasado.
Actualmente, la Iglesia de San Miguel, de estilo barroco, es una de las iglesias más grandes de Hamburgo y atrae a un gran número no solo de peregrinos cristianos, sino también de turistas.
La torre original de 132 metros de la iglesia de ladrillo y hierro contiene la torre del reloj más grande de Alemania. Justo encima del reloj hay un mirador, desde donde se abre una magnífica vista de la ciudad, el río Elba y el lago Alster.