Descripción de la atracción
La Basílica de Sant Apollinare Nuovo es una de las iglesias más antiguas de Rávena, construida en la primera mitad del siglo VI por el rey ostrogodo Teodorico como capilla palaciega. Inicialmente, esta iglesia arriana estaba dedicada al Cristo Redentor, y en 561 el emperador bizantino Justiniano I le dio el nombre de Sanctus Martinus en Coelo Aureo. Después de la supresión del culto arriano, se volvió a dedicar en honor de San Martín de Tours, un ardiente oponente del arrianismo.
Según la leyenda, el Papa Gregorio Magno ordenó que se taparan todos los mosaicos de la basílica, ya que su exuberante resplandor distraía a los creyentes de las oraciones. En 856, la basílica fue renombrada nuevamente, esta vez en honor a San Apolinario, cuyas reliquias fueron trasladadas aquí desde la Basílica de Sant Apollinare in Classe.
El ábside y el atrio de la iglesia fueron modificados y reconstruidos varias veces, a partir del siglo VI, cuando algunos de los mosaicos originales fueron destruidos, por considerarse demasiado arrianos. Afortunadamente, se han conservado los mosaicos de las paredes laterales, 24 columnas con capiteles corintios simplificados y el púlpito. En algunas columnas, todavía se pueden ver fragmentos de figuras que alguna vez representaron a los godos y la corte de Teodorico y que fueron removidas durante el Imperio Bizantino. El último trabajo de restauración de los mosaicos tuvo lugar a mediados del siglo XIX y el ábside fue completamente reconstruido después de la Primera Guerra Mundial.
En la parte superior de la pared lateral izquierda de la basílica hay 13 pequeños mosaicos que representan los milagros y parábolas de Cristo, y en la pared derecha hay 13 mosaicos que representan la Pasión y la Resurrección. Al mismo tiempo, no hay escenas de flagelación y crucifixión. Los mosaicos están separados por un panel decorativo que representa un nicho en forma de concha y dos palomas. Los historiadores creen que al menos dos maestros trabajaron en estas obras de arte.
La entrada a la basílica está precedida por un pórtico de mármol construido en el siglo XVI. Y junto a él, a la derecha del pórtico, hay un campanario redondo de los siglos IX-XI. En 1996, la UNESCO incluyó a Sant Apollinare Nuovo en la lista de Patrimonio Cultural de la Humanidad.