Descripción de la atracción
La Puerta de Alcalá, ubicada en el centro de Madrid, en la Plaza de la Independencia junto al Parque del Buen Retiro, es uno de los principales monumentos de la ciudad.
La primera Puerta de Alcalá fue erigida en 1598 por orden del rey Felipe III en honor a la llegada a Madrid de su esposa, la reina Margarita de Austria. La composición de la primera puerta consistió en un arco central, decorado en la parte superior con una estatua de piedra de la Madre de Dios, y pequeños anexos a ambos lados. La puerta de Alcalá era una de las puertas principales de Madrid, había cinco puertas de este tipo en total.
Casi dos siglos después, en 1769, el rey Carlos III decide derribar las antiguas puertas, erigiendo en su lugar unas nuevas, más amplias y majestuosas que las anteriores, que se suponía que iban a convertirse en un símbolo del Madrid renovado. Un gran número de arquitectos famosos de esa época se dedicó al desarrollo de proyectos para un nuevo monumento. Pero al final, ganó el proyecto del arquitecto Francesco Sabatini. La apertura de la nueva puerta, en cuya apariencia se mezclan dos estilos: barroco y clasicismo, tuvo lugar en 1778.
La puerta es una estructura de piedra granítica de cinco vanos, con tres vanos centrales, con arcos de medio punto y dos laterales, rectangulares. Las fachadas del edificio están decoradas con pilastras, columnas, imágenes escultóricas de cabezas de león y cuatro virtudes: sabiduría, justicia, coraje y moderación. Sobre el arco central está tallada la inscripción “Rege Carolo III. Anno MDCCLXXVIII ", que se traduce del latín como" Rey Carlos III, 1778 ".