Estar en la Ciudad Eterna solo por un día puede parecer un giro maligno del destino. La capital italiana es tan hermosa y sorprendente que un año no será suficiente para conocerla en detalle. Y, sin embargo, puede conocer Roma en 1 día si se entrega por completo a su ritmo y atmósfera e intenta visitar al menos las obras maestras arquitectónicas más importantes y famosas.
Coliseo de la palabra "colosal"
El anfiteatro más grande del mundo antiguo alguna vez tuvo al menos 50 mil espectadores. Ochenta de sus entradas conducían a las gradas, donde la nobleza romana y la gente común observaban las luchas de gladiadores que tenían lugar en la arena. El techo del Coliseo fue estirado y era un toldo para protegerse del mal tiempo o del sol abrasador, y las paredes del anfiteatro se erigieron con mármol travertino extraído en Tivoli. El Coliseo fue construido durante ocho años en los años 70 d. C. y hoy esta magnífica estructura es una de las pocas que han sobrevivido en el planeta desde entonces.
Fuente de los Cuatro Ríos
Una de las mejores fuentes romanas se encuentra en Piazza Navona. Simboliza los cuatro ríos principales del mundo: el Ganges, el Danubio, La Plata y el Nilo. Las esculturas de mármol blanco que adornan la fuente fueron construidas a mediados del siglo XVII según el diseño del gran Bernini, y su obra inmortal está coronada con un obelisco egipcio de dieciséis metros de piedra de Asuán. La fuente se alimenta del acueducto más antiguo de Roma, y la propia Piazza Navona fue un estadio para competiciones atléticas durante el reinado de Cayo Julio César.
Para volver a Roma
Un lugar de la Ciudad Eterna donde todo turista busca visitar es la famosa Fontana de Trevi. Hay una señal según la cual cualquiera que haya arrojado una moneda en su cuenco seguramente regresará a Roma. La Fontana de Trevi es considerada la más grande de la capital de Italia. Su altura es de unos 26 metros y su ancho es de casi 20 metros. La fuente fue construida en la primera mitad del siglo XVIII y linda con la fachada del Palacio Poli, pasando a formar parte de ella y luciendo aún más majestuosa.
El estilo barroco en el que está hecha la Fontana de Trevi hace que esta obra maestra escultórica sea especialmente exuberante y grandiosa. En la fuente, piden deseos y hacen citas, y aquellos que tuvieron la oportunidad de ver Roma en 1 día sueñan con una segunda visita aquí. Por cierto, los servicios públicos obtienen hasta 700 mil euros del cuenco de la fuente anualmente. Un ejército de viajeros está dispuesto a pagar un precio tan considerable por la oportunidad de regresar algún día a la Ciudad Eterna.
