Descripción de la atracción
El castillo de Egeskov se encuentra en la parte sur de la isla danesa de Funen. Es el castillo de agua de estilo renacentista mejor conservado de toda Europa.
Por primera vez, se mencionó una fortaleza en este lugar ya en 1405, pero el edificio moderno del castillo se construyó solo en 1554. En esos años, Dinamarca experimentó tiempos difíciles: estalló una guerra civil en el país, provocada por la Reforma. Por lo tanto, los nobles buscaron fortalecer sus propiedades y residencias personales tanto como fuera posible. El castillo de Egeskov es una de esas poderosas estructuras defensivas.
Su nombre se traduce del danés como "robledal", se cree que todo un bosque fue talado para su construcción. Está rodeado por un lago y la única forma de llegar al castillo era a través de un puente colgante. La fortaleza consta de dos viviendas, alrededor de las cuales han crecido muros defensivos, que alcanzan un grosor de aproximadamente un metro y esconden pasajes secretos y reservas de agua dulce detrás de ellos. Por lo tanto, el castillo podría resistir cualquier asedio prolongado.
Posteriormente, el castillo comenzó a utilizarse como residencia familiar ordinaria. A su alrededor, se dispuso tierra agrícola, se extendió un gran bosque y se desarrollaron numerosos parques y jardines. Ahora todo esto se conserva cuidadosamente. Especialmente digno de mención es un elegante parque renacentista con fuentes y árboles ornamentados, un parque paisajístico de estilo inglés, la colección de fucsias más grande de toda Europa y una variedad de laberintos naturales hechos de bambú y hayas centenarias.
El castillo está abierto para visitas turísticas, pero no del todo: una parte importante de sus instalaciones pertenece a la familia del conde que vive aquí. En otras salas, así como en una casa de madera de verano con techo de paja, ahora se encuentran varios museos: un museo de automóviles antiguos, motocicletas, aviones y la historia de la agricultura.