Descripción de la atracción
Cualquiera que haya visitado Gurzuf al menos una vez está familiarizado con la leyenda de los Adalar. Y esto no es casualidad, porque estas rocas están ubicadas en la bahía de Gurzuf, a una distancia de tan solo doscientos cincuenta metros de la costa. Entre los lugareños, estas rocas se llaman "gemelas". La palabra "Adalary" es de origen turco y se traduce al ruso como "islas". En la antigüedad, las rocas formaban parte de la costa del mar, pero luego el istmo se hundió en el agua y se separaron de la costa.
Las guías turísticas de Crimea y los libros de texto de geografía describen las rocas de la siguiente manera: estas rocas blancas son dos islas idénticas, alcanzan unos treinta metros de diámetro, la distancia entre las rocas es de unos cuarenta metros. Pero esta descripción es seca, breve y poco interesante. Muchos los consideran solo rocas que se han convertido en un refugio para las aves marinas, o fondos inusuales en fotografías de turistas curiosos. De hecho, son más que rocas. Esta es una leyenda creada por la naturaleza, y luego por sí misma una historia inmortalizada en piedra.
Los Adalars son un sueño hecho realidad para todos los buceadores. Para ser honesto, los investigadores de las profundidades del agua están interesados no solo y no tanto en los peces que nadan en las profundidades junto a las rocas en grandes cantidades. El misterio es que las rocas descansan en el lecho marino, y el fondo es solo un almacén de hallazgos interesantes. En primer lugar, se trata de fragmentos de productos de arcilla que datan de los siglos XII-XVI. Érase una vez, barcos anclados en este lugar, cargados con diversas mercancías. Entonces las rocas seguían siendo una costa, y no islas como lo son ahora. Algunos buceadores tienen suerte y hoy encuentran aquí la evidencia más interesante del pasado. Algunos de ellos levantaron del agua ánforas completamente conservadas.
A principios del siglo pasado, apareció un proyecto, según el cual se planeaba conectar la roca Jenevez Caya y las rocas gemelas mediante un teleférico. En las profundidades de Genevez-Kaya, se cortó un túnel especial para este propósito. Pero el plan no se hizo realidad, el teleférico quedó solo como un proyecto.
Hay varias leyendas y leyendas asociadas con estos lugares. El origen más antiguo e irreal en esencia habla de Peter y George, hermanos gemelos. Otro habla del restaurante Venezia, y esta es una historia más real. Supuestamente, una vez existió un restaurante de este tipo en las rocas, pero se derrumbó después de un terremoto. Para los turistas que visitan Gurzuf, estas historias son sin duda muy interesantes. Después de todo, cualquier camino de piedra guarda los secretos más curiosos del pasado.