A veces puedes ver cosas extraordinarias con tus propios ojos. Por ejemplo, en Vietnam, este estado del sur de Asia, hay casas de estilo francés. Este hecho no sorprenderá a los conocedores de la historia, ya que el territorio de Vietnam es una antigua colonia francesa.
Además de la arquitectura europea en sí, se conserva el estilo francés, especialmente en los famosos centros turísticos, que puede sentir cualquier turista que elija unas vacaciones en Vietnam en octubre. Y además de eso, familiarícese con las bellezas de los parques nacionales, sienta el aliento de la historia en las ruinas de los complejos de templos y pruebe el arroz más delicioso del mundo.
Estado de ánimo de octubre
Las condiciones climáticas para el mes central del otoño vietnamita se caracterizan por la variabilidad. La temporada de lluvias está llegando a su fin, sin embargo, aún queda un largo camino desde el comienzo del período seco. Los verdaderos maestros de octubre son el sol y el agua celestial, que alternativamente intentan ahuyentar a los turistas con temperaturas excesivamente altas o con tormentas.
La columna de temperatura se congeló a alrededor de +30 ° C, y si comienza a moverse, entonces, para disgusto de los turistas, solo hacia arriba. En combinación con la alta humedad, estas condiciones climáticas no son muy favorables para los ancianos y los niños pequeños. Por lo tanto, esta categoría de viajeros debería optar por visitar Vietnam en un período más favorable.
Thaibin está llamando
Los vacacionistas en octubre deben hacer un viaje a Thaibin, aunque solo sea para participar en un evento único: el Festival de la Pagoda de Keo. Este hermoso edificio religioso se asemeja a una flor de loto y tiene 120 habitaciones. Fue construido por un monje local usando el dinero que recibió de los residentes locales para recibir tratamiento médico. Una vez tuvo la suerte de curar al propio emperador, cuya gratitud era inconmensurable. Ahora la Pagoda de Keo es la principal atracción de Thaibin.
Milagro de la naturaleza
Esto es lo que los lugareños llaman la bahía de Halong. Están totalmente respaldados por los invitados del país que vieron este milagro. Esta cala única es parte del Golfo de Tonkin. Y su nombre se traduce del vietnamita, como el lugar donde el dragón se hizo a la mar. Según las creencias de los residentes locales, este fabuloso monstruo aún vive en el fondo de la bahía. El número de pequeñas islas que son visibles desde el agua superó las tres mil, y una de ellas fue la residencia oficial del ex gobernante del país. Por sus paisajes únicos, obras de arte creadas por la propia naturaleza, la bahía está incluida en la lista de la UNESCO.
La isla más grande es Catba, casi la mitad está ocupada por un parque nacional. Lagos, cascadas, grutas y arrecifes de coral en la zona costera: todo está en este pequeño terreno. Muchas de las cuevas de la isla tienen hermosos nombres poéticos, como el Palacio Celestial o Tambor, llamado así por el sonido del viento, similar al tambor.