Descripción de la atracción
El Museo de la Magia de París es un establecimiento privado ubicado en el sótano abovedado de la casa donde vivió el joven Marqués de Sade. Un pequeño museo (tres salas) introduce a los visitantes en la historia de la "magia", ofreciendo admirar los accesorios de los ilusionistas: cajas con un secreto, espejos torcidos, "varitas mágicas", sombreros, gafas que permiten ver a través de la ropa y otros dispositivos similares.
Se exhiben los accesorios de los trucos una vez famosos: "volando en el aire" (el cuerpo del hijo del mago parecía flotar sobre el suelo), "silla mágica" (el asistente se sentó en ella y desapareció), "aserrando a una mujer". (el museo tiene accesorios para el primer truco de este tipo y para uno posterior, cuando partes de la mesa aserrada se separaron en diferentes direcciones). Se exhiben carteles antiguos que anuncian las actuaciones de magos famosos. Hay una colección de engaños ópticos, en particular, un sistema de espejos que le permite introducir el reflejo de una persona como si estuviera dentro de una ilusión óptica. También hay un museo de autómatas: allí puedes ver más de cien autómatas, que son un cruce entre un juguete mecánico y una obra de arte.
En el museo se llevan a cabo espectáculos de magia en determinados días. También hay una escuela de magia: cursos donde se pueden aprender algunas técnicas psicológicas para trabajar con un público y varios trucos con cartas, monedas, anillos, pelotas.
El museo no es para todos y, según los turistas, no todos se van felices. Algunas personas piensan que el precio de la entrada no se corresponde con la calidad de los servicios: el museo no abre todos los días, la sala está mal ventilada, la exposición es pequeña, la exposición es solo en francés y no todas las máquinas expendedoras funcionan. Por otro lado, los niños pequeños están encantados con el espectáculo: no les importa en qué idioma esté si el mago saca un conejo vivo de su sombrero. Un adulto que ha amado los trucos y las ilusiones desde la infancia también puede divertirse.