Descripción de la atracción
El festival Gion Matsuri, uno de los más antiguos de Japón, le dio fama al Santuario Yasaka. El festival, que se está preparando para todo un mes, se celebra en julio. El día de su realización, una gran procesión de carros y palanquines recorre la ciudad. Quienes se sientan en ellos arrojan al público manojos de paja envueltos en hojas de bambú, que simbolizan los deseos de salud para todo el año.
Este festival se remonta al 869, cuando mikoshi, ídolos portátiles, se exhibían en las calles de Kioto por orden del emperador. Y frente a la entrada del templo, que entonces se llamaba Gionsha, se exhibieron 66 alabardas según el número de provincias japonesas. Se suponía que todo esto protegería a los habitantes de la capital y a todo Japón de la epidemia de peste. Sorprendentemente, estas medidas funcionaron y la plaga retrocedió. Como muestra de gratitud, los residentes salieron a las calles. El Festival de Gion Matsuri sirvió como prototipo para los festivales celebrados en otros asentamientos, y en algunos lugares incluso conservó su nombre.
El santuario de Yasaka también se conoce como Yasaka-jinja y el santuario de Gion. Gion, el área del templo en Kioto, tiene reputación como distrito de entretenimiento desde el siglo XV, con casas de té y teatros kabuki, así como restaurantes donde se puede cenar con geishas. No muy lejos del templo se encuentra el Parque Maruyama.
La construcción del templo se inició en 656 en honor al santo budista Gozu Tenno, y a finales del siglo X, el emperador Ichijou agregó el santuario a la lista de los ídolos más importantes, en la que solo había unas dos docenas de ellos en ese momento.
El edificio principal del templo se erigió en el estilo arquitectónico tradicional de Gion en 1654. El templo recibió su nombre oficial en 1868. El complejo del templo incluye varios edificios, una puerta, una sala principal y un escenario para representaciones y rituales. Por la tarde y por la noche, el templo está iluminado por muchos faroles, en los que suelen colocarse los nombres de los donantes que apoyan el santuario. Los lugareños creen que las oraciones en el Santuario Yasaka traen felicidad y ayudan a curar enfermedades.