La capital de Suiza es una ciudad agradable y acogedora, con todas las instituciones e instituciones estatales que dependen de su estatus. Y al mismo tiempo, los paseos por Berna te dan la oportunidad de disfrutar de la arquitectura antigua, las acogedoras calles y plazas de la ciudad vieja, para sentir el aliento del tiempo.
Paseos históricos en Berna
Si explora la ciudad por su cuenta, es importante determinar en el mapa dónde se encuentran las principales atracciones. Luego, debes encontrar la ruta más corta a través de la capital suiza y salir a la carretera rápidamente. No tendrá que caminar demasiado, porque los principales "puntos destacados" de Berna se concentran en el centro histórico, los más importantes de los cuales son:
- La torre de la prisión, que aparece hoy en un papel completamente diferente;
- Torre del reloj con figuras en movimiento;
- "Bear Pit", que dio nombre a la ciudad y el escudo de armas correspondiente;
- una catedral gótica con un campanario dirigido al cielo;
- numerosas fuentes callejeras, también consideradas obras de arte.
Estos lugares se pueden explorar sin ayuda, pero es mejor si hay un guía cerca que cuente muchas historias asombrosas sobre un monumento, escultura o fuente en particular.
Caminando por las calles y plazas antiguas
Para muchos huéspedes de la ciudad, el conocimiento de la capital de Suiza comienza en la plaza Kornhaus, en la que se encuentran muchos monumentos de historia y arquitectura. No sin la fuente, que tiene un nombre aterrador "Devorador de niños" y una edad venerable, apareció aquí en 1516.
Las principales tareas que se le asignaron a esta fuente, además de suministrar agua, fueron intimidar a los jóvenes habitantes de Berna, para guiarlos por el camino correcto. No se sabe cómo los niños que vivieron en la Edad Media trataron este momento educativo, pero hoy no asustarán ni al joven bernés ni a su compañero que vino de visita.
Además de la fuente con un nombre tan aterrador, está la Kornhaus en esta plaza, que da nombre a la plaza. Los conocedores de la arquitectura reconocerán instantáneamente que este complejo fue construido en estilo barroco. Junto a ella se encuentra una iglesia gótica que data del siglo XIII, en su interior se encuentran elaborados frescos que fueron pintados en el siglo XV. Aquí se encuentra un campanario aún más antiguo, que se considera la principal atracción de Berna y atrae a muchos turistas.