Descripción de la atracción
Cascata delle Marmore es una cascada artificial en Umbría, creada por los antiguos romanos. La altura total de sus tres secciones alcanza los 165 metros, lo que la convierte en una de las cascadas más altas de Europa y la cascada artificial más alta del mundo. Y el mayor de sus tramos tiene 83 metros de altura.
Cascata delle Marmore se encuentra a 7 km de la ciudad de Terni. Su nacimiento es el río Velino, que también alimenta una central hidroeléctrica construida en 1929. La propia cascada cae en el valle formado por el río Nera. Un dato interesante: la cascada de agua se “enciende” y “apaga” según un horario específico de acuerdo con los deseos de los turistas y las centrales hidroeléctricas. Los turistas intentan estar en la cascada en el momento en que se abre la puerta para ver la parte más emocionante del espectáculo. Primero suena una señal, luego sube la esclusa y en cuestión de minutos un pequeño arroyo se convierte en un río de pleno caudal, que cae desde una altura vertiginosa.
En un camino especialmente trazado, puede subir hasta la cima de la cascada o pasar por un túnel hasta la plataforma de observación; sin embargo, si permanece allí durante el espectáculo, puede mojarse hasta la piel. Una plataforma de observación más segura se encuentra en la parte superior: desde allí se abre una vista maravillosa del valle de Nera.
El propio río Velino fluye a través de las tierras altas que rodean la ciudad de Rieti. En la antigüedad, alimentaba un pantano, que era fuente de constantes epidemias de malaria. Para solucionar este problema en el 271 a. C. se construyó un canal para desviar las aguas estancadas a los acantilados cerca de la ciudad de Marmore. Desde allí, el flujo de agua cayó al valle del río Nera. Sin embargo, esto creó otro problema: durante el período de inundaciones, las aguas de Velino inundaron la ciudad de Terni. Esto continuó durante varios siglos, hasta que en 1422, por orden del Papa Gregorio XII, comenzó la construcción de un nuevo canal. Otro canal fue construido en 1545. Es cierto que esto no ayudó a resolver el problema por completo: Terni se salvó del peligro, pero el campo comenzó a inundarse regularmente por las aguas del Nera. Recién en 1787 Cascata delle Maromre adquirió su aspecto moderno, lo que permitió controlar el flujo de agua y evitar consecuencias desagradables.
